martes, 9 de febrero de 2016

Reseña: Medio Rey, Joe Abercrombie



¡¡Una portada bonita!!



Título: Medio Rey.

Editorial: Fantascy. 

Sinopsis: «Juré vengarme de los asesinos de mi padre. Seré medio hombre, pero pronuncié un juramento entero.» Yarvi, el hijo menor del rey, nació con una malformación en una mano que ha llevado a todo el mundo, incluso a su propio padre, a considerarlo «medio hombre». Por eso, en lugar de formarse como guerrero, al igual que el re sto de varones de su estirpe, se ha dedicado a estudiar para convertirse en uno de los clérigos del reino. Sin embargo, en la víspera de la última prueba para ingresar en esta poderosa orden de sabios, a Yarvi le llega la noticia de que su padre y su hermano han sido asesinados. Él es el nuevo rey. Pero tras una terrible traición a manos de sus seres queridos, Yarvi se encontrará solo en un mundo regido por la fuerza física y los corazones fríos. Incapaz de llevar armadura o de levantar un hacha, deberá afilar y agudizar su mente. Cuando se juntan a su alrededor una extraña hermandad de almas perdidas, descubrirá que esos compañeros inesperados tal vez puedan ayudarle a convertirse en el hombre que quiere ser.

Páginas: 348.

Reseña:

Cuando comencé a leerlo fue porque me habían hablado muy bien del autor y antes de meterme en una de sus sagas más adultas decidí comenzar por algo más sencillo. Conforme leía me di cuenta de que me sonaba la manera de escribir y recordé que ya había leído La Voz de las Espadas.

Y qué decir del libro. Me ha encantado. Lo he devorado de una sentada, en un solo día. Un principio trepidante y lo que parece ser un cliché acaba dándose la vuelta de tal manera que cuando te lo devuelven es más un homenaje que falta de imaginación. Sí, es un libro en el que hay un Viaje y el protagonista Crece en el Viaje. Pero no se parece a nada que haya leído antes.

La ambientación es tal que sin necesidad de que las primeras páginas sean excesivamente explicativas te enteras de todo. La civilización de este mundo se articula alrededor del Mar Quebrado y las naves y los buques pueden hacer que se gane una guerra más que las espadas, por el comercio, que es fundamentalmente marítimo. Empezamos en el Reino de Gettlandia, en eterna guerra con Vastelania, pero se acaba recorriendo casi toda la circunferencia del Mar Quebrado. Quien controle el mar controla el mundo, un poco como el Mediterráneo y todos pujan por hacerlo su Mare Nostrum.

La Clerecía es el orden que recoge la sabiduría y cada rey tiene un Clérigo que lo aconseje, para que pueda elegir el bien mayor y el mal menor y en teoría todos los reyes están sometidos al mando del Alto Rey, aconsejado/controlado por la Clériga Mayor del Reino, la Abuela Wexen.

Sin hacer spoilers puedo decir que todos los personajes están construidos de manera soberbia. Aunque puedan entrar en los cánones de lo que se esperan (el mercenario que es capaz de ser fiel y cambiar a una mejor persona, por ejemplo) o que la trama pueda parecer manida (el hijo que jura vengarse del asesinato del padre), es un chiste más del autor. Porque sí, tiene todos esos elementos, pero utilizados tan bien, caracterizados con tanta elegancia que leer es una auténtica delicia.

El protagonista, Yarvi, al que llaman Medio Hombre o Medio Rey (cosa un poco 
exagerada) por su mano deforme es el segundo en la línea sucesoria, pero por azares del destino de golpe y porrazo se ve sacado a rastras de la Clerecía y colocado en el trono, donde descubres que entre otras cosas es un pobre segundón con la autoestima baja y una madre que pese a ser la Reina Dorada, la comerciante más astuta de todo el Mar Quebrado que convierte en oro todo lo que toca podría ser la Reina de Hielo.

O eso crees. O eso te hacen creer.


Spoilers posibles:

Porque Laithlin es un personaje ante el que me quito el sombrero. Empieza sentenciando: en el entierro de su primogénito y su marido le echa en cara a su hijo el segundón, el deforme, aquel que siente que no deja de decepcionarla haga lo que haga, “alguno de los dos tiene que ser el hombre aquí” a convertirse en la princesa encerrada en la Torre que no se rinde a su suerte y que acaba degollando a su guardaespaldas juramentado que ella había elegido como su guardian por amenazar a Yarvi, con el que tiene un reencuentro después de creerlo muerto francamente emocional, donde te das cuenta de que o bien ha decidido quererlo tal y como es o siempre lo ha hecho pero como el punto de vista era el del Medio Rey te han hecho creer otra cosa.

Y Yarvi, oh, el niño miedica que vive su propia Odisea y que tan hábil e inteligente como el mismo Ulises consigue por medio de sus ardides volver a su tierra y al trono. Crece muchísimo y es un crecimiento creíble. Por supuesto, no empuña un arma y se convierte en el mejor espadachín del reino, sino que cuando está armado es un poco desastre y se le da mejor la palabra y las zalamerías pero el caso es que, como él mismo dice, sólo media guerra se gana con espadas. Juró vengar la muerte de su padre y lo ha hecho. Lo está haciendo.

Nadie me gustó por lo loco que estaba. Pero no loco en sentido figurado sino clínico. Andar acunando espadas, … no me esperaba que fuera el perdido rey Uthil y que las traiciones en esa familia real sean por lo visto la moneda de cambio habitual. En general todos los que forman la compañía de desarrapados, los esclavos autoliberados son personajes consistentes, cualquier cosa menos planos. ¡Yo también quería beber del agua del pozo del pueblo de Jued al final del libro!

Y la esclavista. Ebdel Aric Shadikshirram. La odias desde el primer párrafo, ¡a ella le daría yo piedad y compasión! Pero incluso ella es tan sólida, tan compleja como cualquiera de los demás.

Fin spoilers.


Ah, los personajes son geniales. Pero la trama no se queda detrás. ¿El final? No me lo esperaba. Nadie, si me permitís el chiste malo, se lo esperaba. Y lo mejor es que, aunque es una trilogía, no te deja necesitando saber más. Podría haber acabado ahí, no tiene cabos sueltos. Sí, la historia no está terminada en cuanto al mundo, pero la de los personajes podría finalizar ahí. Sólo que no lo hace. Se pausa y se reanuda en el siguiente, siete años después.

Y tú sólo tienes la opción de correr a conseguir la continuación. Que sí. Que todas las críticas que he encontrado van en el mismo sentido: un buen libro pero que palidece al lado de otros dirigidos a un público adulto del mismo Abercrombie. La Voz de las Espadas me gustó muchísimo pero no lo tengo tan fresco como para poder compararlos, pero lo que sí tengo claro es que teniendo en cuenta únicamente a Medio Rey es un libro redondo y sumamente recomendable.

Puntuación: 
******


2 comentarios:

  1. Por el momento lo dejo pasar que tengo muchos libros pendiente y no estos ahora pare meterme en una saga. Buena reseña. Besos

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    1. A mí me ha encantado y lad continuaciones están muy bien, no baja el nivel. Cuando aligeres la lista de pendientes podrías ponerlo también.
      Es genial.

      Un beso

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